“Creemos que el Gobierno no ha respetado el derecho ciudadano a saber y a preguntar, y la correlativa obligación del Gobierno a responder. Un derecho que enlaza con el principio democrático, con el derecho a la participación en los asuntos públicos, con el derecho a recibir información veraz, y en definitiva, con el principio de rendición de cuentas”, continuaba Legarda.
Desde el Consejo de Transparencia y Buen Gobierno, el organismo que vela por el acceso a la información pública, lamentaban la decisión del Consejo respecto al Portal. “Solo nos han llegado dos casos que estamos tramitando y que han llegado porque, pese al cierre del Portal de Transparencia, se ha hecho una excepción por la COVID-19. Eso es una prueba de que la Administración está siendo muy rigurosa con la interpretación de las excepciones”, explicaban a Newtral.es.

Reclamaciones recurrentes
“Consideramos que se protege a la ciudadanía dándole la información que necesita, no negándosela. La crisis sanitaria no es una crisis de transparencia”, concluía el diputado vasco en el Congreso.
La del miércoles no es la primera reclamación de transparencia en la gestión de la crisis del coronavirus que ha recibido el Gobierno en estos meses. A mediados de abril, un informe de la Junta Consultiva de Contratación Pública del Estado, dependiente del Ministerio de Hacienda, concluía que el apagón informativo en cuanto a los contratos públicos para suministros y material médico en el marco a la pandemia era contrario a la ley, como publicaba El Confidencial.

Otra de las principales demandas de transparencia durante el estado de alarma es la referida a los expertos que han asesorado al Gobierno. La falta de claridad en estos meses ha supuesto que sea difícil saber con certeza cuántos comités de expertos hay, quiénes son sus miembros, cuándo se reúnen o qué peso tienen sus opiniones en las decisiones.
[¿Un comité de expertos transparente? Lo que sabemos y lo que deberíamos saber]
Helen Darbishire, directora de Access Info, apuntaba a la necesidad de transparencia para que la sociedad pueda confiar en sus representantes: “Tenemos que saber exactamente qué datos se utilizaron para tomar cualquier decisión y qué personas contribuyeron a la toma de la decisión, aunque al final sea una decisión política”. Sin embargo, seguimos sin saber los nombres de quienes contribuyen a decidir los cambios de fase, a pesar de que la Ley de Salud Pública lo exigiría.
